martes, 28 de junio de 2022

Número de teléfono 621 274 767: falsa encuestadora del SERGAS

Son las ocho menos veinte del 28 de junio de 2022. Recibo una llamada del número 621 274 767. Al otro lado de la línea, una mujer de edad media me pide responder a una encuesta de la Consellería de Sanidade de la Xunta de Galicia.

Una trampa. La Consellería de Sanidade, igual que el resto de administraciones públicas, te llama desde un número con muchisimos dígitos. La señora del teléfono 621 274 767 debe pensar que en Galicia chupamos el dedo.

Pues no, señora mía. No somos tontos ni tontas en estas tierras del noroeste de las Españas. ¿Piensa que va a colarnos el anzuelo de una encuesta que usted inicia diciéndome mi edad? ¡Por favor!

Le sugiero, señora del móvil 621 274 767, que se valore usted más y busque un trabajo digno. Deje de molestar. No va a conseguir vendernos un seguro o lo que venda usted por medio del engaño telefónico.

Pero ni siquiera le echo a usted la culpa de estos chachullos telefónicos, de estas estafillas de listillos y listillas que aspiran a un trabajo de culos sentados. La culpa la tienen los que les pagan por molestarnos a las ciudadanas y ciudadanos decentes.

Espero que este Gobierno del señor Sánchez se ponga las pilas algún día y prohiba llamadas como las que hacen desde el móvil con número 621 274 767. Yo no tengo por qué aguantar a las comerciales y a los comerciales estafadores.

Pero estas llamadas del 621 274 767 y otros números, me preocupan por las personas mayores que las reciben y son estafadas o, simplemente, asustadas y preocupadas. Respeten a la tercera edad. Dejen de llamar. Dejen de molestar. Dejen de joder.


María Rey
Economista


viernes, 17 de junio de 2022

​Trabajo y capital en el siglo XXI de Albino Prada


Trabajo y capital en el siglo XXI de Albino Prada es un libro de sólo 131 páginas que se lee rápido por su brevedad. Su contenido no anima mucho a la lectura. Se nota que quien escribe es un profesor de economía, más puesto en dar clases tediosas que en escribir libros amenos.

El profesor Albino piensa y reflexiona. Cree que hemos avanzado mucho respecto a siglos pasados. La esclavitud fue abolida. Un gran avance. El siguiente avance a tener en cuenta es la reducción paulatina de horas de trabajo sin merma económica.

Advierte que vamos a retroceder. Va a llegar la esclavitud a sueldo. Está tan convencido de la llegada de esta nueva esclavitud a nuestras vidas que nos ve poniéndonos en alquiler para sobrevivir. Espero que no sea para tanto.

Como bien dice, la esclavitud es una violación de los derechos humanos esenciales. Las personas debemos seguir siendo libres. Pero, ¿somos tan libres como creemos? La mayoría trabajamos por necesidad y muchos realizan trabajos que no les gustan.
Reconozco que el libro desata los pensamientos de una, pero está lejos de ser ese libro ameno que busca el lector poco puesto en la materia. Don Albino no sale de sus clases de Economía Aplicada. Le parece que los lectores saben tanto como sus alumnos.

La portada de este breve manual de Economía está relacionada con su contenido. Un hombre con aspecto de ejecutivo está metido en una rueda que corre, corriendo él dentro. Debe ser el futuro esclavo con trabajo.

Os recomiendo el libro por las pocas páginas que tiene. Lo edita la Universidad de Vigo. Seguro que hay muchos alumnos de Economía que lo tienen de lectura obligatoria.

No creo que mucha gente esté dispuesta a pagar 8,35 euros de manera voluntaria por un libro tan breve. Don Albino cobra cara su sabiduría en la materia. Tal vez haya fijado un precio elevado para este libro sobre el mercado laboral que se avecina pensando en la inflación que estamos sufriendo. Un profesor de economía sabe mucho de inflación.

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viernes, 10 de junio de 2022

La inflación no respeta la comida de mascotas

La inflación no respeta la comida de las mascotas que llenan de alegría las casas de muchas personas. La comida de los perros no se salva de esta tendencia al alza, que avanza a pasos agigantados hacia el descontrol total.

Durante el confinamiento de la pandemia, la soledad llevó a muchas personas a adoptar una mascota. Un pequeño perrito hacía más llevaderas las horas interminables de encierro continuado. Se estima que las adopciones de perros crecieron un 300% y las de gatos superaron los 400%.

No esperaban los adoptantes de perros y gatos, que después de la pandemia del coronavirus, el individuo Putin decidiera hacernos la guerra a todos en Ucrania, desatando la inflación mundial. De haberlo sabido, tal vez hubieran dejado el perro adoptado sin adoptar.

Ahora, los dueños de canes y felinos, están sufriendo una inflación del 80% en alimentación para mascotas. Es mucho gasto para muchas y muchos. Los más desalmados cortan por lo sano y abandonan a sus pobres mascotas a su suerte. Se percibe un mayor abandono animal según se va incrementando la inflación.

Afortunadamente, el abandono de los animales domésticos no es una tendencia mayoritaria. En muchas familias, se aprietan ellos el cinturón para que a sus mascotas no les falte un alimento de cierta calidad, en cantidades suficientes.

El Gobierno sigue indiferente al problemón de la inflación generalizada que estamos viviendo. Cada día somos más pobres. Nos estamos convirtiendo en un país de ciudadanas y ciudadanos empobrecidos. Ni siquiera vamos a poder comprar el saco de pienso que necesita nuestro perrito que nos mira con carita de hambre.

María Rey
Economista

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