La Economía española va como va. Es decir, va como siempre: bien para algunos, mal para la mayoría. Vivimos en un país de ir tirando. Le preguntas a la vecina cómo le va y te contesta que va tirando. Todos vamos tirando. Te sobran los dedos de una mano para contar las personas que contestan que les va bien la vida en general y la economía doméstica en particular. Los del todo bien son más soñadores que realistas.
Una, que es economista, ve que los problemas macroeconómicos no cambian. Los males económicos de este país nuestro se derivan de tres problemones base:
1) La baja productividad de las empresas.
2) El nivel de deuda corporativa de las empresas.
3) La capacidad de pago de las deudas circulantes de las empresas.
La baja productividad de las empresas se explica por unos trabajadores y trabajadoras poco o nada motivados. Si a la casi nula motivación le sumas la ecasa inversión en bienes de equipo, tenemos el resultado de una productividad irrisoria en comparación con las altas productividades de las principales economías europeas.
Encima las empresas se endeudan más de la cuenta. El nivel de deuda corporativa se dispara. Todo es pedir prestado. La autofinanciación queda en el olvido. Ni se la plantean. Lo fácil es endeudarse. Lo difícil es tener que ir pagando esa deuda.
Por eso no sorprende que la capacidad de pago de las deudas circulantes por parte de las empresas haga aguas. El circulante financiado con préstamos a corto plazo es un mal negocio. Te lleva hacia la suspesión de pagos más pronto que tarde.
Soy pesimista. En un país mayoritario en pymes y en micropymes el futuro económico nunca sonríe. Somos como el vecino que intenta ir de vacaciones al Caribe trabajando de barrendero. No hay dinero para tanto. Por eso pide un préstamo para el viaje al Caribe. Y cuando llega moreno del Caribe, vuelve a endeudarse. Es septiembre y toca pagar los libros de los niños. En enero seguirá pensando en otro préstamo. La cuesta de enero necesita una ayudita. Al final el vecino del viaje al Caribe acaba a las puertas del comedor social de Cáritas. La Economía es así de dura.
María Rey
Economista
Envío gratuito para pedidos superiores a 29 € en productos vendidos o gestionados por Amazon. Devoluciones gratuitas hasta 30 días después de recibir el pedido amzn.to |
Valerie Bach es feliz en su casa de Bruselas con su hija vietnamita que la hace madre soltera. Viven Valerie y Lou en... newyorkchic1.blogspot.com |
No hay comentarios:
Publicar un comentario